Coronación de la O

El andar de la cuadrilla en la Coronación de la O ha suscitado todo tipo de comentarios, a algunos ha gustado y a otros no; normal, pasa con todas las extraordinarias.

Yo vi un andar elegante y portentoso, que hubo fallos claro, no es un paso cualquiera, y no quiero que suene a justificación, pero el andar tan distinto al del Viernes Santo se notó y dejó bien claro que, para ir desde Triana a la Catedral y volver, no tiene otro andar que el que año tras año, y cuando el tiempo lo permite, demuestra la cuadrilla de los Ariza, es decir, andando con él.

El andar de Junio lo vi elegante, con alegría, decidido, con poderío, precedidas de grandes levantás todas las chicotas, vi unas vueltas que me fascinan, andando siempre de frente, ahora eso sí, por momentos lo vi intermitente, para prueba de ello, el vídeo, la revirá llegando a San Jacinto es de las cosas mas espectaculares que he visto con un paso de Semana Santa, será por las circustancias del momento o por lo que fuera, pero aquello se ha quedado grabado en mi memoria, aquello y...la entrada de la Estrella.

La segunda chicotá del vídeo, ya dentro de Pagés del Corro, se ve un andar excesivamente corto, a veces incontrolado, dando muestra de las dimensiones de un paso enorme que debe asentarse desde la primera chicotá, se ve un ejemplo de una de las chicotás malas que dio la cuadrilla el pasado 2 de Junio.



Lo que si que tengo muy claro, y sin pretender buscar la objetividad porque éste es un blog personal, que pocas cuadrillas levantan como la de los Ariza, y este paso es el máximo exponente de ello, que pocos capataces serían capaces de llevar este paso paseándose por las calles de Triana como lo hizo en la Coronación y que poquísimos serían capaces de hacerlo los Viernes Santo de vuelta de la Catedral a Castilla.

Esa es la cuadrilla del palio de la O, con sus peculiaridades, con sus capataces de siempre, y que siempre serán los mismos a pesar de la política de las hermandades y sus nada clarivedentes intenciones. Los Ariza son los capataces de la Hermandad, a la que consideran suya, donde ha crecido la última generación de la saga, los que hacen que sus cuadrillas sean elogiables y admiradas, los que representan un trabajo antiguo y distinto, una forma peculiar y propia de hacer las cosas que no puede pasar desapercibida para nadie, unos capataces que dignifican el oficio de ser costalero...envidia y admiración, crítica y halagos, animadversión y respeto levanta esta familia en Sevilla....yo tengo una cosa clara que me dijo una vez un amigo que va también delante de pasos, un amigo que tiene a su padre como uno de los grandes capataces de Sevilla, si quieres aprender cosas sobre este mundo fijate en "el de los pelos blancos"...